Soy una parte de ella una parte de un corazón que se engendrara de una célula apenas que diera vida a la mía una chispa de amor que junto conmigo creciera hasta rebosarme la vida tanto que no cabría si el universo no fuere tan vasto Una parte de ella vive en mí no sé cuánto en realidad pero se que entero yo en ella viviré por siempre en sus pensamientos, en sus brazos en su pecho, en su alma y no hablo de otra que de ti no refiero mis palabras a un amor perecedero no valdría la pena escribirlo ni meno contarlo hablo del amor bueno que siempre recibí de ti y aunque a veces llorares por el dolor que te causare siempre estuviste ahí soportando pena o angustia consolándome cuando lo necesitaba tendiéndome la mano cuando estaba caído o riendo con ganas conmigo… Uo guardas rencores tu gran corazón no tiene de esos lugares y con eso me enseñaste a perdonar aunque ¿sabes? me hace falta un poco más y mientras vivas se que me lo mostrarás Por eso hoy vengo no a saludar vengo a desearte total felicidad esa felicidad que pospusiste quizá valió la pena por haberme sabido encaminar y ahora en este día para mi tan especial mi gratitud está completamente contigo Y ¡Decirte que me siento orgulloso de llamarte madre! ©Carlos di Paulo Zozaya
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